Hola a todos:

En varias  ocasiones ha surgido el tema de la meditación en este foro y en el inglés. Eso es lo que PR vende actualmente como la forma práctica de alcanzar la paz interna. Como todos sabemos, esa forma práctica se reduce a cuatro técnicas de meditación de sobra conocidas. El resto son añadidos disfrazados, con el único objeto de adoctrinar paulatinamente  a los incautos hacia una dependencia a su persona sin límites.

Lo que ya no es tan conocido, porque PR nunca ha alertado sobre ello, es que la meditación, en según qué casos, también puede tener efectos negativos y, a veces, hasta mortales.

Originalmente, las técnicas orientales que se centran en la respiración, no estaban ideadas para reducir el estress o conseguir relajación, sino que se trataba de herramientas espirituales, diseñadas supuestamente para limpiar la mente de impurezas y perturbaciones y poder llegar a alcanzar la iluminación, un concepto tan nebuloso como el de Dios.

El Santo Nombre (Holy Name), o la 3ª, como se la denomina ahora, fue siempre, por así decirlo, la técnica madre. Durante las primeras décadas, el Agya (órdenes del divino), era que se debía de practicar constantemente, las 24 horas del día, independientemente de la meditación formal: 1 hora por la mañana y otra hora por la noche. Posteriormente debió de recibir “inspiración” de las altas esferas y lo redujo a una hora al día quitando de un plumazo lo del “recuerdo constante”. A lo mejor cayó en la cuenta de que tanta dedicación apartaba a los premies del único objeto de adoración que era su sacra persona. Como todos sabeis se trata de una técnica basada en la respiración, que por cierto, tiene otras variantes de las que PR no habla ni por encima.

Lo que PR ha hecho es, sacar la meditación del contexto budista o hindú y dejar que cada uno interprete lo que quiera, lo cual ha conducido a más de una aberración.

He traducido un artículo que apareció en el foro inglés y he resumido las opiniones de diferentes especialistas en esta materia que considero interesante conocer.

También existe en Internet un excelente trabajo sobre este tema en la siguiente página:  http://www.prem-rawat-maharaji.info/index.php?id=31

Según el maestro de meditación Lorin Roche, alentar al desapego de este mundo, como solía hacer PR, fomentando la anulación de los deseos o la separación de los seres queridos, es un veneno que puede llevar a estados depresivos profundos en muchos casos.

El Dalai Lama afirma que estos métodos de meditación tienen que manejarse con mucho cuidado,  y que los occidentales deberían de profundizar más en la tradición oriental, pues, de otra forma, pueden surgir problemas físicos o mentales.

Yo recuerdo haber hablado sobre este tema con algunos premies de ashram y he podido comprobar que algunos de ellos estaban visiblemente “pasados de rosca”. Relataban experiencias extrañas, alucinaciones, voces internas, que lo único que propiciaban era crear una especie de separación con respecto a la llamada gente “normal”.

La meditación puede llegar a anular los estímulos mentales, creando cierta desensibilización emocional que impide actuar correctamente a nivel social cuando la situación lo requiere. Es curioso que PR siempre haya considerado a la mente como  nuestro enemigo principal y más temido.

“La meditación no es buena para todos los pacientes que sufren desórdenes emocionales e, incluso, puede resultar dañina para cierto tipo de ellos”.

El doctor Solomon Zinder, director del departamento de neurociencia en la Universidad de John Hopkins, alerta que durante la meditación, el cerebro segrega serotonina, que puede ayudar a quien sufre una depresión suave. Sin embargo, demasiada serotonina, puede ocasionar en algunos casos una ansiedad paradójica inducida por la relajación.

Este tipo de personas, en lugar de relajarse se angustian y pueden incluso, llegar a sufrir ataques de pánico.

Zinder dice que, en algunos casos de esquizofrenia, la meditación puede llevar directamente a la psicosis.

¿Y qué pasa con los buenos sentimientos que se pueden experimentar en meditación?, ¿existe otra explicación para el sentimiento trascendental de unión con el universo?.

El Dr. Andrew Newberg de la universidad de Pensilvania, escaneó los cerebros de budistas meditando y lo comparó con imágenes sin meditar. Newberg observó que la sangre fluye al lóbulo parietal superior posterior, disminuye durante la meditación. Este área del cerebro determina los límites del propio cuerpo en relación con el entorno y nos permite surcar un mundo tridimensional complejo sin chocar con los objetos. “Sabemos que dicho lóbulo juega precisamente ese papel peculiar porque los pacientes con la misma región dañada, literalmente no pueden moverse sin caer”. Newberg dice que el tener experiencias espirituales de unidad con el universo con pérdida del sentido del “yo”, puede deberse a lo que ocurre precisamente en ése área del cerebro. “Si bloqueas dicha área pierdes el límite entre el “yo” y el resto del mundo”.

¿No será que lo que se experimenta al meditar es sólo un extraño efecto secundario por someter al cerebro a condiciones insólitas?

El Dr. Michael Persinger, un profesor de neurociencia en la universidad laurentina de Canadá, después de investigar a un montón de meditadores, averigüó que algunos de ellos presentaban síntomas de complejo parcial de epilepsia, tales como anormalidades visuales, audición de voces, percepción de vibraciones o conductas automáticas, tales como narcolepsia. Hay que tener en cuenta que los pacientes epilépticos que padecen ataques en el lóbulo temporal,  sufren alucinaciones visuales o auditivas, que suelen interpretar como experiencias místicas; algunos están, incluso, convencidos que conversan con Dios.

Recientemente Persinger se dedicó a investigar las llamadas “experiencias místicas” bajo condiciones controladas de laboratorio. Colocó a  voluntarios un casco, equipado con un juego de imanes, a través de los cuales dirigía una débil señal electromagnética. Persinger descubrió que los ataques inducidos en el lóbulo temporal, generaban el mismo tipo de alucinaciones y experiencias místicas de las que hablaban los pacientes epilépticos.

Cuatro de cada cinco personas que tuvieron este tipo de experiencias, hablaron de la proximidad de un ser sensible o entidad. Algunos lloraron, otros dijeron que Dios les había tocado y otros se asustaron. Hubo quienes dijeron que habían hablado con demonios y malos espíritus.

Persinger añade que si esto ocurrió en un medio controlado como es el de un laboratorio, ¿qué intensidad podrían llegar a alcanzar estas experiencias si ocurrieran a altas horas de la noche en soledad o en un ambiente favorable como puede ser el de una iglesia o mezquita?

¿Es esto una indicación de que las llamadas experiencias místicas pueden estar causadas por ataques, por una disfunción temporal del circuíto,  cerebral provocada por condiciones anormales, tales como privación sensorial, o por una disminución del flujo sanguíneo en el lóbulo parietal?

Adicionalmente a los descubrimientos de los neurocientíficos, existe una evidencia experimental que debería de tenerse en cuenta.

Hay peligros potenciales clarísimos en los retiros de meditación de larga duración, particularmente cuando se trata de principiantes.

Christopher Titmuss, un antigüo monje budista que reside ahora en Inglaterra, hace retiros anuales de meditación Vipassana en Boda Gaya, India. Informa que, ocasionalmente, la gente pasa pòr experiencias muy traumáticas que requieren ayuda inmediata, a veces mediante el uso de fuertes drogas e, incluso, hospitalización. Otros llegan a experimentar un terror pasajero, con la mente fuera de control, o bien, temor a volverse loco. Asimismo, una alienación de la realidad convencional, que impide a la consciencia recobrarse sin intervención activa.

Uno de los participantes en un retiro de meditación Vipassana del maestro Goenka, llamado Tristán, escribe: “Me gustaría contar algo maravilloso de mi experiencia, pero no puedo. Durante los diez días que duró el retiro, me asaltaron alucinaciones, tales como estar dentro de un huevo, ser un animal parecido a un pájaro con las alas rotas, o circular por túneles a través de mi cerebro. El último día, escuchando la conferencia de clausura, solté un gran grito y me desmayé”. Tristán acaba relatando que padeció una psicosis y tuvo que permanecer varias semanas en un hospital psiquiátrico.

Geoffrey Dawson, un maestro de meditación Zen y psicoterapeuta, ha conocido a veinte personas que sufrieron experiencias mentales angustiosas como resultado de asistir a cursillos en el Centro de Retiro Vipassana Goenka, en Blackheath (situado en las montañas azules de Australia).

Dawson dice que estos meditadores se sintieron fragmentados en lugar de integrados. Sufrieron ataques de pánico o episodios depresivos que persistieron durante meses después de finalizar el retiro.También se dieron algunos episodios maníacos, uno de los cuales fue diagnosticado y tratado posteriormente como un desorden bipolar.

La familia de una jóven asistente al retiro informó a Dawson que  la habían notado ausente y esquiva después del retiro. Su condición psicológica se fue deteriorando poco a poco hasta llegar a convertirse en un estado sicótico. A los dieciocho meses tuvo que ser hospitalizada y , al final, acabó suicididándose.

Goenka advierte que la meditación no está recomendada para personas con desórdenes psiquiátricos serios, porque no es real que ésta vaya a curar o aliviar los problemas mentales. Por este motivo ha introducido cuestionarios en sus cursillos, con objeto de averiguar quién se encuentra en esta condición, aunque es dudoso que los asistentes que sufran algún tipo de desorden,

 vaya a confesarlo por propia iniciativa.Muchos premies, cuando se enteran a través de Internet o por otros medios de toda la información negativa que existe acerca de PR, recurren a la técnica del avestruz y alegan que todo ello no tiene nada que ver con su maravillosa experiencia de meditación.

 A ellos no les importa para nada la conducta o la ética de PR en el pasado. El que haya abusado verbalmente hasta la saciedad de gente cercana a él, que le ha entregado su vida y su tiempo; el que se haya comportado con estas personas como un auténtico tirano autoritario y despótico, como digo, carece para ellos de importancia.

Toda la información contrastada que existe en Internet sobre su persona y su forma de actuar, a ellos no les importa. Porque para ellos lo que tiene validez es su dosis de paz mental. Dicen que lo que sienten es muy real y que todo lo demás no cuenta..

Yo creo que hay que desmitificar todas las creencias acumuladas en el transcurso de los siglos acerca de los llamados “maestros” y sus enseñanzas.

Conseguir que el pensamiento descontrolado se calme un poco, no es tan difícil. Si despojamos a la meditación de ese halo místico y misterioso que la rodea, resulta que lo de respirar conscientemente no es algo tan extraño. Muchos médicos y terapeutas, informan sobre los efectos beneficiosos de una buena oxigenación de la sangre. También es de sobra conocido el equilibrio psicológico  que se consigue cuando las ondas cerebrales se enlentecen mediante una respiración pausada y bajo control hasta llegar a alcanzar estados de trance (nivel Alfa), o de ensueño (nivel zeta)

 Lo que ya no es tan normal es que por haberte dado unos “consejos” saludables, te exijan lealtad casi de por vida o te hagan escuchar interminables charlas y firmar un contrato claramente abusivo, como ocurre con PR. Por no mencionar el que no se te permita solicitarle directamente aclaración a dudas que puedas tener respecto a la meditación, como ocurre en cualquier otra area de la enseñanza.

Yo he estado “meditando” durante treinta años y puedo decir que lo de sentarse expresamente a no pensar (pues de eso trata este rollo), puede llegar a convertirse en una batalla. Lo más que puede ocurrir, dependiendo del tiempo que emplees, es que los pensamientos, acaben aburriéndose y te concedan un pequeño descanso. Pero, no nos engañemos, se trata sólo de una pausa. Cuando te levantes y reanudes tu vida habitual, vuelven a la carga, y, posiblemente, con más fuerza que antes.  Puedes llegar a creerte que eres una persona muy realizada porque meditas. A lo mejor, vas por la vida con esa sonrisa de gilipollas que ponen algunos meditadores, para que todos perciban tu halo de elevación, lo feliz que eres y lo realizado que estás. Lo digo porque he conocido a bastantes premies con ese síndrome de sabiduría. No te engañes, “premie ji”, yo también lo he hecho y, créeme, no compensa tanto esfuerzo.. Total, para que al final, si quieres ser un poco coherente contigo mismo, tengas que tirar la toalla y reconocer que has empleado tu tiempo en NADA.

Un saludo para todos

Daikos